La prometida villana del protagonista masculino - 18

Capítulo 18 - No lo he olvidado (1)

Simon Hillard era un niño que se estaba preparando para todas las desgracias que le sobrevendrían. Así fue como lo definió Louise cuando lo conoció. Fue bastante cruel que sólo tuviera unos diez años cuando aprendió a actuar de esa manera, pero también era inevitable dadas sus circunstancias. Era un mecanismo de defensa para sobrevivir.

Simón era el primo de Ian y era el único hijo del hermano del Rey y, por lo tanto, también estaba en la línea de sucesión para el trono. Tenía la misma edad que el Príncipe Heredero y su existencia era una posible semilla de conflicto. Simon siempre tuvo cuidado de no eclipsar a Ian en grandeza.

Por supuesto, igualmente era importante que no se viera ni actuara menos que como un miembro de la familia real. Era un tira y afloja constante, pero era brillante al hacer concesiones en su situación. Sin embargo, no fue por elección; si fallaba, podría costarle la vida. Simon Hillard era un joven que también sufrió la intensa fiebre llamada Stella Lapis, su primer amor, en "Los amantes falsos de la Academia". A menudo se le llamaba el desafortunado personaje masculino secundario.

Louise tenía nueve años cuando lo conoció.

“Soy Louise Sweeney. Es un honor conocerle, Su Gracia Hillard".

"..."

Asintió con la cabeza en silencio. Ian había llevado a Simon al invernadero de Sweeney para "darle un poco de aire fresco", pero para Simon no era más que acoso.

“¿Por qué no le respondes? Mi prometida está molesta". Dijo Ian con voz disgustada.

"¡No estoy enojada! Y por favor deja de llamarme tu prometida".

"No tienes que decir eso cada vez que te llamo así".

"¡Imbécil! ¡Que insensible...!"

Una voz tranquila interrumpió su pelea.

"... Simon Hillard".

Ian y Louise dejaron de discutir y miraron a Simon al mismo tiempo. Esa pareció ser su respuesta al saludo de Louise. Ella se rió a carcajadas ante su cariñosa y torpe presentación, a pesar de lo descortés que era hacerlo. Con el paso del tiempo, los dos lograron hacerse amigos. Louise era quien lideraba sus conversaciones, mientras que Simon simplemente asentía con la cabeza o daba una respuesta corta a sus palabras.

"Ya sabe, Su Gracia".

A pesar de la naturaleza reticente de Simon, a Louise le encantaba hablar con él. Eran camaradas. A diferencia del protagonista masculino Ian, Simon y Louise se vieron obligados a abrazar sus desgracias al final de la novela original.

"Quiero darte esto".

Simon pareció sorprendido cuando Louise le regaló un lirio de los valles.

"¿...?"

"Tómalo"

Louise le puso las flores en la mano. Su padre había dicho que las flores tenían el poder de traer felicidad.

“Es nuestro secreto, ¿de acuerdo? Su Alteza podría enojarse".

Además, como protagonista masculino, Ian no necesitaba esos poderes.

"… Gracias" Dijo en voz baja y miró los pétalos.

"Bonita, ¿eh?"

Él asintió con la cabeza. Mientras lo miraba, Louise rezó para que en el futuro Simon no se enamorara demasiado de Stella. Por supuesto, era increíblemente de mala educación rezar para que el amor de los demás no sea grandioso, pero Louise aún recordaba cómo el Simon original la había amado tan profundamente que le había dejado una cicatriz igual de grande.

"Me alegra que te guste. Es mi flor favorita".

"... Voy a..."

"¿Qué?"

"Ah. nada..."

¿Qué había dicho? Louise le preguntó unas cuantas veces más, pero él no repitió sus palabras.

Lo que probablemente no era una ilusión era su expresión feliz cuando miraba las flores.

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Louise parpadeó lentamente ante la tenue luz cuando se despertó. Había soñado una sombra fugaz del pasado.

"Simon Hillard..."

Louise susurró ese nombre tan preciado. Tenía la misma edad que Ian y sus capacidades intelectuales eran similares, así que era bastante natural que los dos fueran a la Academia el mismo año, aunque Ian tenía una ligera ventaja sobre él.

'Todavía no lo he visto'.

Cuando llegó aquí, pensó que lo vería en todas partes. Era algo extraño. Se había topado con Ian mil veces, ¡pero ni siquiera se había encontrado cara a cara con su buen amigo! La Academia no proporcionaba información de contacto individual y los estudiantes tenían que confiar completamente en la probabilidad de conocer a alguien.

'Espero que tengamos alguna clase juntos'

De lo contrario, era posible que no pudiera encontrar al solitario Simon. Louise se sentó lentamente y estiró los brazos hacia arriba, completamente curada del tratamiento de ayer.

"La magia es asombrosa".

Después del tratamiento del sanador, todo el calor y la irritación habían desaparecido. No dolió ni un poco estirarse. La magia era la mejor.

Se levantó de la cama descalza y, mientras aún estaba en pijama, se acercó a la ventana del dormitorio y la abrió de par en par. Inmediatamente entró aire fresco en la habitación. Louise cerró los ojos por un momento y sintió la brisa fluir por su rostro. La corta temporada de primavera todavía estaba allí.

Louise se lavó, se cambió y peinó cuidadosamente su largo cabello. Debatió si debería peinarse o no, pero se rindió. Ella realmente no tenía la habilidad para eso.

'Ahora que lo pienso, Simon siempre fue bueno peinando mi cabello'.

Durante su infancia, fue Simon quien arregló los enredos de su largo cabello y lo peinaba con esmero. No encajaba del todo con su naturaleza tranquila.

'Sus dedos siempre fueron muy hábiles'.

Dedos tan diestros no eran de mucha utilidad para un príncipe que algún día podría reclamar el trono, y la única vez que mostraba su talento era cuando peinaba el cabello de Louise.

Después de una batalla con su cepillo para el cabello, Louise tomó alegremente su bolso y abrió la puerta. Habían pasado dos días del del inicio del semestre y estaba relativamente libre ya que no tenía muchas clases.

"Oh"

Louise se topó con Claire, que estaba parada en la puerta. Se miraron la una a la otra con caras de sorpresa antes de soltarse en carcajadas. Louise parecía haber abierto la puerta cuando Claire estaba a punto de llamar.

"Qué oportuno". Claire continuó riendo mientras caminaban juntas por el pasillo. “Escuché que te habías lanzado a salvar a la princesa ayer en la biblioteca. Vine aquí para ver si estabas bien"

Había dejado de reír y la miraba con preocupación.

“Estoy bien, me curaron con magia. ¿Y salvé a la princesa? ¿Es ella realmente tan popular?"

“Sí, la de primer año, Stella Lapis. Escuché que es una gran belleza".

Claire sonrió con complicidad.

“Es una gran belleza, tanto que a su alrededor todo brilla... ¡aaah! Quiero decir, ¡Claire también es hermosa!"

“Gracias, aunque sé que lo dices por cortesía. Después de todo, el príncipe Louise se enamoró de la belleza y la salvó".

"No es gran cosa".

"¡Creo que lo es!".

Claire de repente dejó de caminar y se dio la vuelta para mirar a Louise. Tenía una expresión graciosamente estricta.

"¡El príncipe atrapó su cuerpo en el aire para que no se cayera! ¡Terminó casi aplastado y lastimado!"

"Mi cuerpo no se aplanó, como puede ver".

“Aún debe haber sido doloroso. El rostro del presidente estaba pálido de miedo cuando me contó sobre el accidente. También estaba muy preocupada por él".

Louise dudó de sus oídos por un momento. ¿La cara de Ian se puso pálida? ¿Ese tipo?

“El consejo estudiantil es un grupo que protege a los estudiantes, pero tú también eres una estudiante importante. No lo olvides".

Claire dijo con firmeza mientras miraba directamente a los ojos de Louise. Sus palabras eran estrictas, pero el significado detrás de ellas era tan dulce que se conmovió un poco. El consejo estudiantil realmente se cuidaba el uno al otro.

"De todos modos, estoy feliz de que no parezcas herida".

"Gracias por pensar en mí".

"Por supuesto, yo fui la responsable de llevarte al consejo estudiantil".

"Fue mi elección".

Claire acarició la cabeza de Louise y sonrió.

"Puedo ver por qué el presidente piensa que eres linda".

"... ¿Qué?"

“No le digas al presidente que estoy acariciando tu cabello. Él estará en guardia contra mí".

Claire se encogió de hombros y se dio la vuelta.

“Voy a pasar por la oficina ahora. ¿Y tú?"

“Tengo que ir a la sala de conferencias. El profesor Hewitt dijo que hoy publicaría nuestra lista de lectura asignada".

"El profesor Hewitt probablemente ya publicó un aviso al amanecer, así que será mejor que te apresures".

"¡¿Al amanecer?!"

"Es el tipo de persona que controla el tiempo por segundos".

Louise asintió. Esa fue la impresión que tuvo de él también.

"Te veré más tarde. Cuídate y no olvides volver a ir a la enfermería si te sientes mal”.

"Si, gracias. Que tengas un buen día, Claire ".

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