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Fui descubierta por el villano - 02


Capítulo 02 - Celestine

Al día siguiente, Selena salió lentamente por puerta temprano en la mañana y se mezcló con la multitud mientras continuaba a un ritmo lento.

Sus ojos estaban huecos, como si hubiera perdido el alma, y su boca estaba rígida y parecía que ni siquiera estaba respirando.

Ella había estado así desde que encontró la carta de Celestine la noche anterior.

Ahora no tenía opción. La fuga Celestine fue un acto inmaduro que condenaría a muerte a todos los miembros de su familia: de acuerdo con la ley imperial, los hombres debía alistarse a los 18 años. Si alguien desobedecía esa ley, no sólo la persona involucrada, sino que también todos los miembros de su familia, sería ejecutados inmediatamente.

"...hijo de puta" Selena apretó los dientes.

Había criado a Celestine incluso mejor de lo que pensaba. Abandonando a su familia por amor. ¿Qué clase de desarrollo dramático era éste?

Selena disparó mentalmente flechas furiosas a su hermano gemelo y suspiró.

Habían tres maneras en que esta situación podía ser remediada:

Primero, debía pagar una multa de 300.000 monedas de oro.

Dado que el gasto anual de la capital fue de 1,2 millones de monedas de oro, el valor era ridículamente alto. Además, era una multa demasiado grande para que la pagara la pobre familia Evans.

Claro, habría sido posible si su madre no hubiera gastado su pensión apostando. Selena frunció el ceño.

Segundo, otro pariente masculino se debería alistar en su lugar.

Después de la deuda de su madre, su familia se separó de ellos al punto en que escupieron sobre ellos cuando se los cruzaron en la calle. En esta situación, si supieran que Celestine se había fugado, serían los primeros en tomar las armas y denunciarlo.

Tercero, la familia inmediata, en este caso su padre, se debería volver a alistar.

Aunque este método era el más comúnmente utilizado... Selena se golpeó el rostor con las manos con una expresión desagradable.

Su padre, Simon Evans, era un paciente con demencia.

Había sucedido hace cinco años. A pesar de que llamó a un médico imperial para tratar la enfermedad, todo era en vano, y ahora estaba tan grave que ni siquiera podía reconocer a Selena la mayor parte del tiempo.

¿Cómo podría un padre así volver a alistarse? Era algo ridículo e imposible.

No quedaba otra forma. Para ser más precisos, esta situación no podría superarse con de forma usual.

"Piensa cuidadosamente" Selena murmuró mientras respiraba hondo. No podía morir así. A pesar de que no era una vida próspera, no le faltaba nada. Esta fue la primera vez que tuvo el amor de una familia a pesar de ser su segunda vida.

No podía renunciar a esta vida, ni a la felicidad que obtuvo de su familia.

A lo lejos, podía ver el campo de entrenamiento de la 3ª división de los Caballeros Imperiales y toda la gente que se movía a su alrededor.

Selena se volvió hacia esa dirección y dio un paso rápido.

Selena y Celestine eran gemelos que se parecían mucho: desde la cara hasta el cuerpo, la forma de hablar, el tono, todo era el mismo. Cuando eran niños, incluso su padre dijo que era difícil distinguirlos. A otros les resultó aún más difícil hacerlo.

Selena enderezó los hombros y reforzó sus pasos mientras caminaba. Cada paso que daba resonaba en su interior mientras acortaba la distancia con la recepción. Selena, cuyo turno fue el siguiente, se paró rígidamente frente al asistente que estaba revisando los papeles.

"¿Cómo te llamas?"

Selena respiró hondo. Su pelo recientemente cortado hasta los hombros la hizo sentir incómoda, pero no podía retroceder.

"Celestine Evans", miró la identificación que trajo y la puso sobre la mesa. "Soy el mayor de la familia Evans."

Selena se convirtió en Celestine.

.

Después de más de 200 años de guerra en el continente, el país que salió victorioso fue el Reino Hilton.

El Reino Hilton se convirtió en el Imperio Patus, y Knox de Hilton se convirtió en Knox le Patus, llamándose a sí mismo el Primer Emperador.

El Imperio Patus fue capaz de convertirse en una poderosa potencia imperial porque fue fundada después de una larga guerra, pero ese poder no duró mucho. Esto se debió a que el Príncipe Heredero, que iba a heredar el trono, era débil; los nobles no eran lo suficientemente leales como para apoyarlo y había muchas fuerzas rebeldes soñando con revivir el reino caído.

Para que el príncipe ascendiera al trono, necesitaba fuerza y poder. Y esa fuerza era un ejército que sólo podía moverse bajo la jurisdicción del emperador. Para lograrlo, se ordenó el reclutamiento obligatorio.

[Los hombres de 18 años deben unirse al ejército. Se les otorgará la gloria de ser soldados que jurarán lealtad a la familia imperial.]

Aunque los nobles protestaron ferozmente, el emperador llevó a cabo su voluntad ejecutando a todos aquellos que se oponían a él. Como resultado, el segundo emperador, Gross le Patus, fue capaz de mantener su poder imperial gracias al ejército. Por lo tanto, el reclutamiento obligatorio continuó, a pesar de que ya habían pasado más de 100 años.

"0 desertores y 0 heridos. Un total de 116 voluntarios de la 3ª unidad fueron admitidos sin ningún problema". Rewan Gauer dijo mientras se ajustaba los anteojos que se habían caído hasta la punta de su nariz. Mientras estaba ocupado con el montón de pesados papeles que sostenía, sacó algunos y se los entregó a la persona sentada frente a él.

"Pensé que esta cosa no es más que una pérdida de tiempo... pero hay algunas personas que destacan..."

Fue Ignis Von Patus, el príncipe del Imperio Patus, quien recibió los documentos oficiales y revisó cuidadosamente cada uno de ellos.

De vez en cuando, personas extraordinariamente talentosas aparecían entre los aprendices.

Las personas talentosas eran en su mayoría aristócratas, pero su estatus en la sociedad no significaba nada cuando se trataba de esto, por lo que normalmente se veían obligados a unirse a los Caballeros Imperiales.

¿Cuántos talentos se han conseguido de esta manera? El Imperio Patus nunca ha perdido estas oportunidades. Por eso Ignis estaba allí personalmente para seleccionar gente talentosa con sus propios ojos.

"¿No hay ni siquiera cinco?" Harto, tiró los papeles a un lado y levantó la mirada.

"No se puede evitar. Los aristócratas prefieren pagan dinero a dejar que sus hijos se alistan, por lo que la mayoría de ellos son plebeyos. Bueno, tendremos que esperar y ver. Porque cualquiera puede convertirse en un buen caballero después del entrenamiento."

Su mano derecha, Rewan, respondió con un encogimiento de hombros.

"¿Qué tal la evaluación?"

"Está en marcha ahora. Vamos a verlo"

"Claro" diciendo eso, Ignis se levantó y se puso de pie. Ese ligero movimiento desvió la atención sobre su brillante cabello plateado y su piel lisa y blanca. Rewan podía sentir el aura escalofriantemente fría del hombre caminando a su lado.

"Letio... ¿es un plebeyo?"

"Debido a que no hay apellido, él debe ser un plebeyo."

"Su lugar de nacimiento no está escrito."

"Mira las notas. Ha escrito que no lo sabe. Bueno, tal vez él es de un barrio pobre."

Ignis asintió con la cabeza. "El hijo mayor del vizconde Kazen, el hijo mayor del barón Eparos, el hijo mayor del vizconde Tyro, el hijo mayor... todos son iguales."

"La alta nobleza paga la multa y se niega a alistarse. ¿Qué se puede hacer?"

"Voy a tener que elevar la multa."

"¿Sabes cuánto serás maldecido por eso? ¿De verdad tienes la intención de vivir mucho tiempo?"

Ignis se rió de su comentario y Rewan continuó: "Creo que todavía están luchando. Lo mejor que le eche un buen vistazo."

Aumentaron el tiro, pero incluso así Ignis no quitó los ojos de los documentos en sus manos, "Por cierto". Hizo una pausa mientras inclinaba la cabeza, "¿Evans?"

Rewan chasqueó la lengua cuando vio a Ignis estrechando sus cejas. "Hace 15 años, era el Comandante de la 2.ª división de los Caballeros Imperiales."

"Ah..." Ignis levantó la cabeza con un suspiro.

"De repente se retiró. Aunque trataron de que vuelva, fracasaron. Decepcionó al Emperador luego de ser vencido, ¿recuerdas?"

"Si, no hay forma de que no lo recuerde, ¿me estás diciendo que el hijo mayor de Evans se alistó?" Ignis volvió a preguntar con regocijo.

"Sí, él Celestine Evans. Si fue enseñado por Simon Evans, sus habilidades con la espada deben ser excepcionales."

"Estoy deseando que lo sean"

"Yo también"

Los labios de Ignis se agitaban hacia arriba, relajándose un poco. Era alguien que aún no había recibido el título de príncipe debido a que necesitaba ser reconocido por el emperador. Lo cual sólo se podía hacer aumentando su base de poder. "Necesito aumentar a mi gente", pensó Ignis, reprimiendo su impaciencia.

"Están reunidos allí."

Ignis miró hacia el lugar al que Rewan señalaba. Había unos cien soldados que estaban tomando la prueba de cortar troncos.

"¿Sabes cómo se ve?"

"Es la quinta persona de la fila tres. Por favor, mire cuidadosamente los documentos."

"Deberías marcarlos. Es difícil de reconocer..."

"¿Ahí está!" Rewan cortó Ignis mientras señalaba a una persona.

Ignis le estrechó los ojos, pero pronto volvió su mirada hacia donde estaba señalando, echando un vistazo rápido como si ya estuviera familiarizado con todos ellos.

"Pero qué diablos..." Ignis frunció el ceño de nuevo tan pronto como vio a Celestine porque se veía muy diferente de lo que se había imaginado.

¿No debería un buen soldado tener hombros anchos, un torso grande y antebrazos gruesos? Pero la persona que vio delante de él era...

"Es delgado". Él era aproximadamente la mitad del tamaño de sus antebrazos; era tan delgado que sus dos muñecas podían ser sostenidas con una sola mano suya. "¿Puede siquiera levantar una espada con ese cuerpo?"

Rewan se masajeó la frente y dijo: "Quizás no lo sepa, pero Evans tampoco era de contextura grande."

No, no lo sabía. Ignis esperaba que era parte de la genética de su familia.

"Sí, es el hijo de Evans. No conocemos su talento."

Simon Evans fue un héroe entre los caballeros por sus legendarias habilidades de espada, que se decía que eran capaces de derrotar dragones. El hijo de Evans también debía ser excelente y tener la habilidad de su padre.

Ignis conservaba la esperanza e estaba intentando calmar su corazón cuando escuchó:

"Es el turno de Evans"

Con las palabras de Rewan, Ignis centró su atención en Celestine que sostenía su espada de una forma inusual.

"Recluta, levante su espada e intente cortar de forma transversal el tronc-"

*¡Chenglang!*

La espada cayó de las manos de Celestine como si no pudiera soportar su peso mientras se agarraba el brazo y se quejaba del dolor. Ni siquiera intentó volver a agarrar la espada caía. Rewan frunció el ceño.

"Será mejor para Evans hacer lo que sea en lo que sea bueno solo" Chasqueó la lengua disgustado y se alejó sin dudarlo. Eso sólo significaba que Celestine ya no era considerado alguien útil. "Vamos a ver a los demás. No hay nada más que hacer aquí".

Ignis, que no separó los ojos de Celestine ni un segundo, asintió lentamente. Movió sus pies con duda, pero rápidamente igualó el paso de Rewan. Antes de alejarse, miro hacia atrás otra vez.

"Pensé que tiró la espada a propósito"

¿Se habrá equivocado?

Ignis siguió adelante con la sospecha clavada en su corazón.

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